La violencia de género: La violencia contra la mujer

Violencia de género

En este post queremos introducir diversos conceptos con relación a la problemática de la violencia de género con el fin de clarificar un poco su significado, así como explicar casuísticas particulares como el ciclo de desarrollo de violencia dentro de la pareja.

Es importante tener en cuenta y diferenciar inicialmente dos términos que se recogen en la literatura y la legislación actual vigente:

  • Violencia doméstica: esta se enmarca en las relaciones de violencia de mujer contra hombre, de hombre contra hombre, de mujer contra ascendientes/descendientes, etc.
  • Violencia de género (VG): refiere a la violencia ejercida por el hombre sobre la mujer con el fin de controlarla y dominarla.

Hay que recalcar también que conflicto en la pareja no es sinónimo de VG. Por lo que para responder realizando un diagnóstico diferencial tenemos que tratar de responder a estas tres preguntas:

  1. ¿Conflicto de pareja o mala relación de pareja?
  2. Contexto de la relación: ¿asimetrías? ¿violencia como forma de resolución de conflictos, intereses, diferencias…?
  3. ¿Hay intención de sometimiento, dominio o provocar daño en la pareja?

Además, como bien sabemos existen diversos tipos de ramificación de la VG en maltrato físico, maltrato psicológico, violencia sexual, violencia económica…

En un post anterior hablábamos de las características psicológicas, cognitivas y emocionales de los agresores de género, teniendo la violencia psicológica sobre la mujer, la finalidad de controlar o dominar conductas, pensamientos y sentimientos a través de la intimidación, abuso emocional, coerción, culpabilización… De manera que ello propicia o puede generar una serie de secuelas en las víctimas de malos tratos como: sintomatología ansioso-depresiva, pérdida de referencias y autoestima, indefensión, etc.

Otro punto muy importante que quisiéramos abordar es sobre la teoría que nos ayuda a explicar una parte del fenómeno relacional que se da en el ciclo de la pareja. Nos referimos a la Teoría del Ciclo de la Violencia planteada por Leonor Walker en 1979.

Esta teoría sirva para explicar en este caso como la mujer que sufre violencia queda atrapada en un ciclo de violencia dentro de la pareja que se retroalimenta, sin muchas veces darse cuenta y con la sensación de no poder salir o poner fin a la relación con la pareja que ejerce el maltratador.

Hablamos entonces de tres fases (subtituladas con frases estereotípicas):

  • Fase UNO. AUMENTO DE LA TENSIÓN (“Se enfada porque me quiere mucho, por lo que no lo voy a molestar”)

Antes de llegar al estallido de violencia, sea por la historia previa o características de las personas que conforman la pareja, se van produciendo pequeños incidentes que van subiendo de intensidad. Aquí nos encontramos que la víctima va evitando y legitimando la violencia por parte de su agresor, justificándola, minimizándola y adaptándose cada vez más a situaciones que suponen una pérdida en su autonomía, autoestima, relaciones interpersonales, etc.

  • Fase DOS. EXPLOSIÓN O INCIDENTE AGUDO DE AGRESIÓN (“Lo hago por tu bien, porque te quiero”)

En este punto de escalada de tensión, cualquier comportamiento o actitud de la víctima es sinónimo de agresión por parte de la pareja. De tal modo que esta falta de control en la víctima supone indefensión y en el agresor como un intento de mayor control cada vez mayor en ella. De tal forma que pueden producirse los episodios violentos más graves y peligrosos para la víctima.

  • Fase TRES. LUNA DE MIEL (“Te prometo que esta vez estaremos bien juntos”)

Generalmente, tras ese estallido se puede producir un arrepentimiento por parte del agresor ante la falta de control. Este arrepentimiento a veces puede ser cierto, pero desajustado. Es decir, la justificación de su actitud o comportamiento violento se atribuye a causas externas muchas veces (ej: fue culpa del alcohol, es lo que haces cariño me pone muy nervioso…).

En este punto se produce una reconciliación donde la víctima se cobija en la relación. En este punto es muy probable que se vuelva a reiniciar el ciclo de aumento de tensión una vez que el arrepentimiento del agresor vaya reduciéndose. Aquí terminamos el post, por lo que si estás interesado, te invitamos desde Psicalma a que leas la obra de Leonor Walker especialista en toda esta temática.

Comment
Name
Email

×