Conociendo un poco más el Trastorno Límite de Personalidad (TLP)
Según los diferentes manuales diagnósticos empleados tanto en psiquiatría como en psicología, el TLP consiste en un patrón de personalidad de inestabilidad en las relaciones interpersonales, autoimagen y los afectos, así como una gran impulsividad.
Normalmente, la persona con TLP experimenta fuertes sensaciones de vacío emocional y necesidad de otras personas para tratar de paliar esta sensación de vacío, caracterizándose por tanto por ser personalidades dependientes del otro.
Además, otra de las características, es la conducta autolesiva que cumple con el fin de poder gestionar y aplacar todo este malestar que se está viviendo.
Se considera el trastorno de personalidad más diagnosticado.
¿Cuándo es habitual su diagnóstico?
Los primeros síntomas suelen aparecer durante la adolescencia y primeros años de la edad adulta joven, pero habitualmente suele diagnosticarse ya en la edad adulta. El diagnóstico se tiene que realizar siempre por parte de un profesional de la Salud Mental y siempre y cuando se cumplan determinados criterios clínicos.
¿Cuáles son sus causas?
Este tema a día de hoy sigue provocando múltiples controversias, ya que los diferentes expertos e investigadores sobre el tema, sitúan las posibles causas en las siguientes, según el Instituto Nacional de Salud Mental (NIH):
- Antecedentes familiares: predisposición genética (otros familiares tienen TLP).
- Estructura cerebral: cambios en las áreas cerebrales encargadas del autocontrol.
- Factores ambientales y sociales: haber sido víctima de diferentes experiencias de abandono, abuso, maltrato, etc.
¿Cómo se trata?
Según un estudio realizado por el Hospital Vall d’Hebrón en Barcelona (2022), el tratamiento preferente es el psicoterapéutico estando, en la mayoría de los casos, combinado con el tratamiento psicofarmacológico. Es importante señalar que existen terapias centradas específicamente en el TLP, tales como:
- Terapia dialéctica conductual: aceptación de las propias emociones sin juzgarlas.
- Terapia basada en la mentalización: estudia la relación entre los pensamientos y los actos.
- Terapia focalizada en la transferencia: centrada en el aumento del autocontrol.
No obstante, es muy importante recalcar que el diagnóstico y evaluación tempranos, son claves para que el pronóstico sea lo mejor posible.
¿Qué relación existe entre el TLP y la conducta violenta?
En un estudio realizado por González Guerrero y Robles Sánchez (2005), el carácter impulsivo y la falta de autocontrol propio de este trastorno de personalidad, se relacionó con los siguientes tipos de delitos analizados en la jurisprudencia española:
- Lesiones
- Robo con violencia
- Homicidio/Asesinato
Por otro lado, en cuanto a la imputabilidad, señalan que “existen datos que muestran que el sujeto límite puede actuar sin que pueda controlar su conducta e incluso en ocasiones debido a episodios psicóticos breves, por lo que la imputabilidad se vería directamente cuestionada”.
Por otro lado, es habitual que exista una relación entre TLP y abuso de sustancias, pudiendo resultar dicha mezcla un factor de riesgo para la comisión de un delito. Como se ha ido mencionando a lo largo de todo el texto, es crucial que el diagnóstico y tratamiento sea realizado por un profesional de la salud mental, así como la realización de un informe pericial psicológico cuando pueda ser necesario porque exista algún tipo de relación entre el trastorno y la posible comisión de un hecho delictivo. Por ello, puedes consultar sin compromiso con los profesionales de Psicalma, especialistas en psicología legal y forense.